DUBROVNIK. PASEANDO POR SUS CALLES, PLAZAS, FUENTES...

...había preparado, a lo largo de más de cuatro meses,  mi esperado viaje a Etiopía y cuando a una semana de marcharme, surge un problema familiar y tengo que cancelarlo, no puedo imaginar, que el mes de agosto me llevaría a Europa... Sin ni siquiera conocer el recorrido del viaje y sólo  unos días antes de la salida, el destino me propone un viaje a Croacia, Bosnia y Eslovenia. Siempre digo, que ahora me apetece perderme por países lejanos, con culturas diferentes a la nuestra y que Europa siempre está aquí. Tal vez por eso, este viaje ha sido tan distintos a los demás.

En mi primera parada, la Perla del Adriático, Dubrovnik. El paseo por sus calles, atestadas de turistas y eso que en esos días no había cruceros, era grato, pero a cada paso, echaba de menos el palpitar de la vida cotidiana de los lugareños. Mi mirada se perdía en sus plazas, fuentes, monumentos...