sábado, 8 de enero de 2011

PERUANA.

...navegué mas de dos horas por el lago Titicaca, para llegar a la Isla de Taquile...la altura, como había pasado casi todos los días del viaje, me estaba matando...así, que sólo pude bajarme del barco y quedarme cerca del embarcadero...el pueblo estaba en lo alto, con un desnivel terrible y mis fuerzas, no me permitían ir hasta allí...como siempre digo, en la vida TODO LO QUE NOS OCURRE, ES SIEMPRE PARA BIEN...y así fue...pude vivir con intensidad, una maravillosa mañana...al pueblo se sube por un angosto camino y por él y a hombro, han de subir todos los víveres, materiales de construcción etc...vivir el enorme esfuerzo que ello supone, a esa altura, es algo impresionante...así, que me animé a caminar un poco, parecía un astronauta en la luna y subir un poco, con algunos de ellos...en un recodo del camino, estaba ella...jugaba con las que parecían sus hermanas...su anciana abuela hilaba lana...qué instante inolvidable, ése en el que ella toma mi cámara entre sus manos y me retrata...luego sonríe al verme y al verse...

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